Cera de abeja: Hidrata, suaviza, nutre, protege y mantiene la humedad de la piel. Evita la sequedad y la aparición de grietas.
Miel de abeja: Conocida por sus propiedades curativas y minerales. Se usa como emoliente natural, humecta, acondiciona, reafirma y nutre la piel, facilitando la cicatrización. Nutre los tejidos proporcionando elasticidad y tersor, previniendo y atenuando la formación de arrugas.
Yogurt: Producto lácteo obtenido mediante la fermentación bacteriana de la leche. Contiene vitamina A y minerales como fósforo, yodo, zinc y potasio.
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